Los Pictogramas como recurso en musicoterapia

By Marilu Salvidio.

abril 11, 2016


Los Pictogramas: comunicación alternativa aumentativa en musicoterapia.

Experiencia con adultos con Síndrome de Down

Con adultos con Síndrome de Down y discapacidad intelectual grave, la utilización de gestos e imágenes es fundamental para otorgar alternativas de comunicación y mantener despierta la atención en la actividad. Por ejemplo relacionar el pictograma de un instrumento musical al instrumento real, haciendo la mímica de su forma de tocarlo acompañándolo con el sonido, les ayudará a reconocer el mismo aun cuando no esté presente, y a pedirlo para tocarlo durante la sesión.

Para este propósito es muy útil asociar el sonido a la imagen, imitándolo con la voz y estimulando así la modulación de la misma, descubriendo sonidos nuevos y enriqueciendo la prosodia.
El uso de apoyos visuales sirve también para dar una estructura temporo-espacial a la sesión, y para enmarcarla dentro de un proceso con objetivos y actividades concretas.

Comunicación Alternativa Aumentativa y Síndrome de Down

Para este fin es muy oportuno acabar las sesiones recordando lo que hemos hecho a través de imágenes que representen las actividades, y abrir la sesión siguiente repitiendo la misma acción, para conectarla idealmente a la anterior. Esta estructura otorga seguridad y aumenta la capacidad mnemónica que ayuda el fluir de la rutina diaria de la persona.

Entre los productos de apoyo de CAA están los aparatos de nuevas tecnologías, como tabletas y eye trackers, que reproducen imágenes y sonidos a la vez, y son activados con un simple toque de la mano o con el movimiento ocular.

Comunicación Alternativa Aumentativa y Síndrome de Down

Ejemplo de VOCA

Un ejemplo muy sencillo y funcional es el VOCA (Voice Output Communication Aids), un dispositivo con pulsador que reproduce sonidos grabados, incluyendo palabras o frases cortas.

Esta herramienta es muy útil para que una persona pueda expresar lo que necesita, por ejemplo cuando se trata de decidir “quiero más” o “ya es suficiente”, manifestar preferencias como “me gusta y “no me gusta” o expresar necesidades como “estoy cansado” o “tengo hambre”.

No hay que olvidar que la comunicación tiene que adaptarse a la persona y no al revés.
Por esta razón creo que es compromiso de cada terapeuta encontrar todas las formas posibles para facilitar el proceso comunicativo de la persona o grupo que está tratando, utilizando creatividad, una atenta observación y todo medio a su disposición.

A continuación te dejamos un vídeo que refleja el uso de Pictogramas y herramientas tecnológicas que ayudan a acompañar y trabajar el día a día de niños y adultos con necesidades especiales.

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